jueves, 12 de diciembre de 2013

La vida del escritor


En la vida real no importa lo inverosímil que sea un hecho —la coincidencia de que William Shakespeare y Miguel de Cervantes murieran en la misma fecha del año 1616, o de que a un hombre le alcance un rayo cinco veces si ese hecho ha sucedido, nadie se plantea si podría haber ocurrido o no. Nuestra credulidad no se ve puesta a prueba hasta el punto de que dejemos de vivir en este mundo y vayamos a buscar otro más convincente. Por eso Dios puede trabajar con las coincidencias más enrevesadas, las intrigas más rocambolescas y dramáticas paradojas de lo más perversas, sin pararse nunca a pensar si su público le comprará la idea o no. Un escritor no cuenta con ese lujo.




Aqui quiere decir que el mundo esta muy mal, pero el puede hacer un milagro para que eso no ocura mas y hacer el milagro y asi paro poder ver que el si existe.

    Si tu historia tiene buenos demasiado buenos o malos demasiado malos, probablemente tus personajes parezcan poco humanos. Dibuja personajes humanos, en situaciones creíbles mediante explicaciones convincentes.



Trata sobre un tema de familia que nunca tendriamos que reñir por muy mal que nos llevemos siempre se puede llegar a un

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